lunes, 24 de noviembre de 2008

Algo se rompió o se está por romper. Ya tu sonrisa no es como la de ayer, y tus palabras se azotan contra el muro que creció de la nada en el medio. Todo pasó fugazmente, y me pregunto como fue; si fue por soltar tu mano, o aferrarme demasiado a ella.
Quisiera bombardear con abrazos esa medianera cruel, pero mis brazos no superan tus distancias; ni la real, ni la que inventas. El amanecer ya pasó y luego vendrá otro, y los albañiles de la soledad irán fortificando esa casa de miedos, de lejanía entre lo que fuimos y lo que somos.
No quiero despertarme un día y encontrarme falta de tus palabras. No quiero despertarme un día y saber que no vas a contestar mis llamados desesperados por un simple gesto de tu parte.
Pero no se luchar, o ya no quiero. No entiendo y no encuentro ese pasadizo secreto que me conduzca de nuevo hacia el pasado de la esencia que escondemos, o queremos esconder.

1 comentario:

simplemente Camila dijo...

te entiendo
cuado algo se rompe
a veces
cuesta demasiado arreglarlo
o ya simplemente, no tenemos ganas